Terminamos de trabajar a las tres y hasta las tres y media no llegamos a la cocina que antes os mencionaba y en la cual devoramos la comida que llevamos todo el día en nuestra mochila. El caso es que a eso de la una yo estaba que me moría de hambre, “¡¡¡uffff que regomello tengo!!!” – no paraba de decir hasta que ya harta, María me dijo: “pues si quieres puedes comerte mis almóndigas”. Me lo pensé un poco pero finalmente accedí a ello con la condición de que me acompañara a semejante festín; ella, en una situación gástrica similar a la mía, es decir, salivando ya con la solo idea de echarse una almóndiga al gaznate no se lo pensó mucho y dijo: “al ataqueeeeeeee”. He de apuntar que tenemos la suerte de disponer de un despacho para nosotros solos.
Aquí las protagonistas del post
Pero había un problema, bueno más bien un pequeño escollo que separaba a las almóndigas de nuestras bocas salivantes y era que no disponíamos de tenedores, evidentemente el hambre es más poderoso que las buenas maneras y los dedos son unos perfectos utensilios para enganchar bolas de carne picada. Y allí nos pusimos los dos a comer almóndigas con unas estupendas patatas fritas cortadas en daditos que servían de perfecta guarnición. Entre bocado y bocado soltaba expresiones como: “ufff que ricas están”, “joder que hambre”, “a tu madre habría que hacerle un monumento por lo bien que cocina”.
En este momento de éxtasis llaman a la puerta, se me resbala una almóndiga que intentaba pescar, mi compañera cambia el color de la piel hacia un tono rojizo y yo me quedo petrificado. “Hola chicos, venía a comentaros que…” – dice la jefa entrando en el despacho. No sabemos qué hacer, hay un momento de tensión, me resbala un goterón de sudor desde la coronilla hasta el cogote y solo a mi se me ocurre decirle a la jefa: “¿Quieres una almóndiga que están muy ricas?”. Ella se me queda mirando y me responde: “No, muchas gracias, voy a comer dentro de un rato”. Al final nos explicó una cosilla y se marcho mientras yo volvía a dirigir la mirada hacia la almóndiga que antes huyó entre mis dedos, ya habrá tiempo después de pensar en el ridículo hecho.
37 comentarios:
Joder tienen una pinta de puta madre de hecho estoy empezando a notar un exceso de salivación, coño que hambre.
yo me hubiese hecho unas cucharas con el papel albal xD
Que mas de una vez lo he hecho
jajajjaj...que situacion!!!!!!
Ahora te digo...viendo la foto...me esta entrando un hambre que no veas...me voy a hacer la cena,ahi os quedais!!!
Chauuuuuuuu
Jejeje q buena pinta tienen. Creo q saliste bien de la situación, tampoco pasa nada por estar comiendo no? He de decir que las albóndigas de mi abuela son lo mejor que hay en el mundo.. y no son de carne picada, se hacen con pan.
Qué buena pinta! me recuerda a las de mi madre
Qué ridículo ni que ná! seguro que a ella se les antojaron también pero no se atrevió
Jejeje a falta de tenedores da igual dedos, bolígrafos o utensilio que se precie mientras sea punzante.
Esas almóndigas estarían muy ricas, pero no has probado las mías te caerían lagrimones como puños.
Kabukimen: Estaban de muerte y con hambre ni te cuento, para chuparse los dedos.
Elisa: Jjejej, nosotros es que no teníamos ni papel albal y con el hambre que tenía no me podía concentrar en otra cosa.
Chapete: La jefa se ha quedado flipada, a saber qué ha pensado de nosotros.
Alana: Pues supongo que no aunque en teoría deberíamos estar trabajando.
Pipis: Joer es que que te pillen comiendo con los dedos es un poco fuerte, yo no sabía donde meter esos dedos llenos de salsita.
Xufi: Eso tiene fácil solución, me invitas un día y te doy mi veredicto.
Pues seguro que tu jefa se quedó con las ganas pero para mantener las formas se quedaría en su despacho salivando.
a eso se le llama interrumpir en el momento más inoportuno jeje
bessos
Que buena pintaaaa! Lástima que tu jefa no haya querido probarlas xDDDDDD
por cierto, mi yaya utiliza mucho la palabra 'regomello', me encantaaaa!!!
Wowwwww.... yo quiero una almóndiga.. sí sí sí... quiero una!!! eso sí, con tomate que una es polaka y adicta al tomate :D
Tienen una pinta que te mueres, eh!
Ke clase de radar les pondran a los jefes para entrar siempre en el momento más inoportuno??? A nosotras siempre nos pillan hablando :/
Almondigas con guisantes, parecen tropezones de carne. Las patatas no se ponen malñas?
Creo que con tu jefa hiciste lo mejor por lo menos no fuistes descortes ni mal educado. Me imagino si tellega a decir que si quiere una te veo cojiendola con la mano y acercandosela a la boca, en ese caso hubueras podido decir que tu jefa comio en tu mano
:S
Yo no como de esas cosas que hann tenido ojos...
Memeeeeee en mi blogg :D!!!
Tu jefa se fue con la triste sensación de un quejido en sus vísceras...(Fijo que está a régimen)
Yo también comí albondigas ayer en un taper, pero vaya, cualquier parecido con tu situación es pura casualidad, jejeje. ;-)
Un blogabrazo.
Macaco: No me extrañaría porque tenían una pinta tremenda aunque un poco calientes hubieran estado mucho mejor.
Yaves: Además es que lo estábamos diciendo: ya verás como entre alguien y nos pille aquí comiendo, y al final de tanto decirlo sucedió.
Carmncitta: Mejor que no las haya querido probar, así tuvimos más para nosotros, jejeje.
Domadora: Que ricas con tomate también, la verdad es que están ricas con cualquier cosa.
Wave: Es que parece que se lo huelen.
Miel: Jjajaj, anda que si me llega a decir que sí me da algo. Y no se ponen malas, además las almóndigas guisaditas con sus patatitas y sus guisantes están de muerte.
Kay: ¿Otro meme? madre mía para que diría nada.
Pareidolia: No creo, esa tía debe comer bien, además la naturaleza le ha dado unos piños que se le salen de la boca.
Dammy: Pero las tuyas eran albóndigas, las mias almóndigas que están más ricas.
No habrá sobrado alguna, es que tienen muy buena pinta.
Ja,ja,ja es que ponerse a comer albondigas en el curre sólo se os ocurre a vosotros... aunque el hambre manda, que eso de que agudiza el ingenio es sólo válido para el de larga duración.
Me voy a comer una manzanita (yo soy más discreta) que me ha entrado hambre con tanto hablar de comida.
Besos.
Hombre la salida que tuviste fue bastante buena, vamos que yo tengo un empleado tan ocurrente y como mínimo le subo el sueldo.
Pez: Que va, nos las comimos todas, de hecho al final cogí un poco de pan de un sandwich que tenía y rebañamos la salsita.
En la oscuridad: Ahora me estoy zampando yo también una manzanita, qué ricas que están y cuando termine un yogur. Es que hasta que coma a las 3.30 todavía queda.
Aiyana: Eso digo yo, que me suban el sueldo que me quiero comprar un piso aunque sea allá en el año 2.020.
Pero... a que mereció la pena hacer el ridículo, jajaja...
Besos.
ñam ñam esas me las comía yo ahora mismo.
casi las dos y no veas q hambre!
Unos consejillos:
A veces conviene montar un dispositivo de camuflaje para integrar las almóndigas en el entorno despachístico. Por ejemplo, se pueden poner unos listados obsoletos encima del tupper, el cual se debe situar detrás de un teléfono o incluso dentro de un carpesano. Comiendo se puede hablar por teléfono. El truco está en aparcar el producto semitriturado en el espacio que hay entre los molares y las encías.
Jajajaja pillada monumental, pero oye, pero tu al menos pudiste darle una alegría al estómago. Y qué buena pinta tienen, menos mal que acabo de comer (sí, ahora, es que uno llega a unas horas, a casa...), que si no se me caería la baba a mi también.
Bueno no pasa nada, yo tengo varios documentos "supuestamente" importantes y confidenciales con manchas del bocata de chorizo que me aprieto a veces de merienda ac ac ac
Ay, que perdia he estado, que de cosas tengo que leer por aqui... y el chino que sigue ahi ¬¬
Jajaja... si, efectivamente las almondigas saben mejor ^^
Y lo de la jefa... te quiten lo bailao jeje, seguro que se quedo con las ganas.
Un beso
Minga en peligro, atención, Minga en peligro!!!
Lara: En aquel momento sí porque me encontraba con un hambre que no respondía de mi.
Makeda: Es que no solo tienen buena pinta sino que además están cojonudas.
Peterpsych: Tu es que eres un profesional, yo en ese momento lo único que me preocupaba era zamparme las almóndigas.
Doctor Jb: Pero es que después me pose morado también a comer en el cumpleaños del compañero este.
Tortuga: Jjajaj, yo lo que suelo hacer es mancharme la camiseta. Hoy tengo una medalla tremenda del zumo de naranja que me he bebido a media tarde.
Cosette: Seguro que cuando cerró la puerta se tronchó de la risa.
Achab: Ain, como sois los del grupo de salvación del Minga, a ver si esta semana también conseguís que se salve.
...mmmm, pues yo me se de uno que le jodía llevarse los tuppers a la oficina, hasta que se dió cuenta de lo que costaban los menuses del día y la clase de mierda que eran...verdad? si te das por aludido, ya sabes. El que está sentado a la derecha del padre...
Que noooooo que era al que tu me invitaste :O
Jjejeje, ya me di cuenta cuando entré en tu blog.
Joder, pues ahora me comía unas almondigas, pero bien a gusto... aunque sean las 10 de la mañana.
Y una cocretas también. Of course.
María se sale. Bueno... ella se sale, pero su madre... la releche.
Fergus A mi lo que me jodía es que los de la "secta" tenían un microondas de mierda y me churruscaba la comida. Menos mal que cuando me largué les dejé un regalito "bien rico" (Chasky dixit)
Jjajaj, ¿puedes especificar un poquito más qué clase de regalito?
Antes de salir por la puerta de la cloaca esa, me pasé por la cocina y les metí una lata de Coca-Cola en el microondas. Lo puse a 30 minutos y... bueno, en fin.
Tocarme los cojones da corriente.
Que se jodan.
Forza Almondigas.
Menudo crack estás hecho, seguro que se lio una buena en la cocina.
almóndigas, cocletas, si señor tú si que sabes!!
Muchos besos chasky man
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