Me gustan las orejas

Pues sí, me gustan las orejas, que pasa, me parecen una de las mejores cosas que hay en este mundo, es un término global que podemos asociar con el placer, con el estómago, con la guarrería, con la moda, con la gracieja o con las putadillas. Vamos a desarrollar un poco más estos conceptos para hacerme entender y que no penséis que estoy como una cabra.

Vamos a ver como os explico lo del placer, ¿ya sabéis que un hombre y una mujer, o un hombre y un hombre o una mujer y una mujer tienen necesidades afectivo-sexuales (que bien me ha quedado esta palabra, eh)? Sí, supongo que sí, pues no me digáis que no mola que os chupen la oreja y que da gustirrinín, ale, pues sopongo que me habréis entendido ya por donde voy, ahora a practicarlo.

Otra cosa que podéis practicar es a comer una ración de oreja a la plancha por ejemplo, qué rica que está tostadita y acompañada de una buena cerveza, ñam ñam, los cerdos serán unos guarros y unos cochinos pero mira que están buenos, y no sólo le puedes comer la oreja sino después si quieres puedes continuar por comerle el morro y finalmente el rabo, no veas si da juego el bicho.

En cuanto a la guarrería no me voy a extender demasiado, solo deciros que no seáis vagos y limpiaros las orejas que tampoco cuesta tanto y así ligaréis más. Y si os empiezan a salir pelos no os los quitéis que estoy seguro que de aquí a unos años será una moda llevándose buenos peláncanos en las orejas que podréis peinar con cepillos especiales.

También las orejas están relacionadas con la moda, desde hace muchos pero que muchos siglos los tíos y tías se agujereaban las orejas para ponerse ornamentos y esta tradición sigue manteniéndose en nuestros días, así podemos ver a un montón de gente con pendientes colgando de sus orejas, aunque no son exclusivos de esta zona, también os los podéis poner en el dedo gordo del pie, ¿a que no hay narices (perdón orejas que para eso estamos hablando de esta parte del cuerpo) a hacerlo?

A ver que me queda, sí la gracieja, ¿alguno de vosotros tiene buenas orejas? me refiero a orejas grandes, parecidas a las del elefante ese que volaba, ¿no habéis llamado Dumbo a ninguno de vuestros compañeros de clase?, además las orejas pueden ser soplilludas o como coliflores como dice Moe (el gran camarero de Los Simpsons) . Pues ahí tenéis una forma fácil para ridiculizar a los demás, ahora yo si tuviera alguno de estos tipos de orejas y se metieran conmigo por ello me la sudaría pero cuando eres un gurriatillo jode un poco.

Y por último las putadillas que pueden hacerse con las orejas, vamos a dar algunas pistas aunque aquí está la imaginación y el ingenio de cada uno para ejecutarlas a su modo, una manera es coger un papel y hacerle forma de cucurucho resultando una puntita fina que introduciremos lentamente por el agujerillo orejil, es importante hacerlo cuando nuestra víctima esté desprevenida así veréis el salto que pega y os descojonaréis de ella. También puede hacerse chupándose el dedo e introduciéndolo a continuación aunque podemos correr el riesgo de encontrarnos después con el dedo lleno de cera. Una putadilla que jode mucho también es meterle un soplaorejas, es decir golpear con los dedos, parecido a como lo hacíamos con las chapas, en la oreja produciéndose un movimiento oscilante, el daño que le haremos será proporcional a la fuerza que ejerzamos.

Como veís las orejas dan mucho juego así que ya va siendo hora de prestarlas más atención. Os dejo con una muestra de orejas, a la izquierda la típica oreja de viejuno, larga aunque a esta la faltan algunos pelos; la segunda es la oreja coliflor adornada con un montón de pendientes, de todas formas veo algunos huequillos que seguro que tapará; la tercera es la oreja gordota a causa de las hostiejas que le daba su madre y las putadillas de sus compañeros que en clase tenían mono de chapas y se entrenaban con sus orejas, como veis este se está dejando los pelos crecer.