sábado, 17 de septiembre de 2005

¿Estoy asentando el cabezón?

No sé lo que me pasa, desde hace algún tiempo ya no me apetece beber alcohol como antes, ahora me puedo tomar dos o tres cervezas con los colegas o un par de copas por la noche, pero llega un momento en el que me encuentro lleno y no me apetece continuar bebiendo. Esto está de puta madre, pero lo que me extraña es por qué desde hace aproximadamente 4 o 5 meses bebo con tanta moderación, ¿me estaré haciendo mayor y asentando la cabeza?.

Antes bebía una copa tras otra y solo paraba, si lo hacía, cuando me notaba tocado, pero ahora es otro tipo de sensación, me siento saturado y pienso en el día siguiente. Ese día siguiente me hace falta, no puedo estar hecho una mierda, necesito aprovecharlo, necesito tiempo, tiempo para hacer cosas y no estar sin capacidad mental, poder utilizar las pocas neuronas que me quedan, o simplemente salir a la calle a hacer deporte y quemar unas pocas energías.

Además de todo esto también está mi salud, no quiero acabar como el presidente de los EE.UU., que por ejemplo tiene problemas de incontinencia, a parte de todos los problemas y estancamiento mental que tiene. Ya que estamos hablando de este personaje, hoy he leído que a un sobrino suyo le han pillado por ir borracho por la calle y por resistirse a la autoridad. Pero no es un caso aislado en la familia Bush, ya en 2001 sus hijas tuvieron problemas con la bebida.

De todas formas, en Estados Unidos si te cogen en la calle borracho te meten en la cárcel, y sin embargo puedes ir con un arma como “Piter por su casa”, son las incongruencias de un país incongruente, con un moralismo inquietante. Pero por qué no puedo ir por la calle como me apetezca, otra cosa es que vaya rompiendo coches, pero qué problema hay en que vaya de un lado al otro de la acera, a quién estoy molestando. Pero claro, supongo que argumentarán que están protegiendo a los menores, pero si éstos están la mitad como cabras, cabras gordas claro.

Pero para solucionarlo ha llegado un héroe (¡qué mitiquín!), un gran gobernador, y como primera medida no habrá Coca-Cola ni Pepsi-Cola en los colegios. La verdad es que los niños yankis se pasan un poco, cada uno consume una media de 800 latas al años, es decir, más de dos latas al día. De todas formas nosotros tampoco podemos quejarnos porque debemos estar cerca de esa cifra, y además no tenemos un salvador como Chuancheneguer (¿ZP?, no, creo que no) contra la gran multinacional refresquera.

4 comentarios:

Deyector dijo...

Allá ellos, pero teniendo en cuenta lo de poder ir armado como "Pedro by his house" y que en las escuelas les están enseñando que son los mejores, los primeros, los más fuertes del mundo y que tienen derecho a avasallar a quien les de la gana, la que pueden liar los críos si les dejan sin coca-cola puede ser muy gorda...

Doctor Brigato dijo...

Chaski estás enamorado...

Wendyqueridaluzdemivida dijo...

Ale Brigatín, que te queda mi blog...te invito a un café con pastas (y a Cris también).

Chasky dijo...

¿Qué es eso de estar enamorado?
¿Es lo que siento por la cosa de Erf, o lo que tu sientes por cris?