domingo, 25 de mayo de 2008

La vida moderna

Si echamos la vista atrás, al inicio de los tiempos, el ser humano lleva en la tierra dos millones de años y en todo este tiempo ha evolucionado de manera sorprendente en todos los sentidos. Pero no tenemos que irnos tan atrás, ni si quiera siglos, para percibir cambios en la sociedad y más en este momento en el que los avances tecnológicos modifican nuestra vida de la noche a la mañana.

Es evidente que estos avances son positivos puesto que nos facilitan muchas tareas pero tienen una vertiente perversa, poco a poco y sin darnos cuenta van acelerando nuestra vida. Ahora todo se hace con mucha más urgencia, en algunos casos ni si quiera nos paramos a pensar en lo que tenemos que hacer, simplemente lo hacemos. En el trabajo vamos a mil por hora; no comemos, engullimos; consumimos música sin escuchar un disco más de dos veces; vamos al gimnasio a machacarnos en el menor tiempo posible; paseamos por centro comerciales siguiendo al culo al de delante y mirando ropa en tiendas atestadas de gente. ¿Acaso no estamos nosotros mismos convirtiéndonos en máquinas?

Un ejemplo de que cada día utilizamos menos el cerebro lo tenemos en el cine. No voy a entrar a valorar la calidad de las películas de ahora con las que se hacían en décadas precedentes, sino en la actitud con la que vamos al cine. Nuestros padres y/o abuelos cuando se acercaban al cine iban a ver una película, sólo eso, centraban toda su atención en ello porque probablemente sería la única vez que la podrían ver. Atendían a cada palabra de los diálogos y no se perdían el más mínimo detalle, sin embargo ahora prestamos más atención al tanque de palomitas o a meterle mano a nuestra pareja en la oscuridad de la sala, como siempre nos podremos bajar la peli o alquilarla no hay problema. Antes si querías ver una película de nuevo debías pagar otra entrada en el cine, además no te podías dormir porque una vez la quitaran de la cartelera se acabó, las cintas dormirían en el fondo de armarios fuera del alcance de la gente común.

A veces es inevitable vivir acelerado si se quiere subsistir, pero dedicarle diez minutos al día en reflexionar hacia donde vamos es muy sano.

24 comentarios:

Anónimo dijo...

tengo 150 discos en el ordenador que no me ha dado tiempo a escuchar, te refieres a eso? je, je.

Eva dijo...

Es cierto, que vamos acelerados, y que tenemos cosas que ni miramos o vemos de pasada. Pero hay algo en lo que estoy en desacuerdo contigo, dices que ahora vamos al cine a atender al cuenco de palomitas; bueno, supongo que habrá de estos casos, pero a mi me parece caro ir al cine, y desde luego no voy a comer, si voy es a ver una película que creo puede merecer la pena. Como te puedes imaginar, puedo contar con el dedo de las manos las veces que fui en los últimos tres años. Las pelis las veo en mi casa sin pagar, y solo pago por ver una película bien hecha y con un buen argumento. Ir a ver tonterías al cine, me parece un lujo y una perdida de tiempo. Y al final haciendo cuentas, tampoco es de las cosas mas caras que se pueden hacer pero es una cuestión de principios razonables. Supongo que aquí dependerá de las persona.

pez dijo...

Respecto a las peliculas no te referiras a las de Ozores porque antes también se intentaba meter mano, se tomaban palomitas y se comia el bocata.

Claro que ya no hay el descanso para cambiar de rollo mientras uno iba al bar.

Lara dijo...

Bueno.... unos aprovechamos más el cerebro que otros, jajaja...
Muuuuuuuuacks!
Pd. por cierto, me extrañó que no me contestaras al email, bueno.... ya está arreglado ;)

Ana dijo...

Vamos a mil (bueno yo ahora no), de ello tomo buena cuenta,con el tratamiento que tengo desde hace 5 años,debido al estrés laboral.
Tienes razón en todo que dices,escuchamos una vez la música que bajamos,hay veces que ni terminas de ver una peli...ya tendrás tiempo,o tienes otra mejor grabada!!

Hay que ir mas de espacio y disfrutar de la vida,cuando se puede,claro...

Besos

carmncitta dijo...

y la pena es que al ir tan acelerados no disfrutamos de las pequeñas cosas, ni apreciamos lo que tenemos igual que antes.


muaks

chapete dijo...

Si es que va todo tan rapido que ni nos damos cuenta,macho!!!

chauuuuuuuuu

BettyBlu dijo...

No vamos deprisa, vamos volando!!!

Pero me quedo con el cine de ahora, con sus maravillosas butacas, el sonido, y la posibilidad de ver una y otra vez la película que me guste, y de disfrutarla como quiera, hay pelis para comer palomitas, otras para besar, o para llorar, o para no despegar ni un minuto la vista.

No sé Chasky, el cine de hoy creo que lo disfruto mas, eso si, deberian bajarle un poquito el precio.

Besitos

Chasky dijo...

Lara: No he abierto el e-mail desde hace unos días, voy corriendo a todos lados últimamente.

Bettyblu: Ya te digo que deberían bajar los precios, y encima que te toque al lado algún pesado que no te deja ver tranquilamente la peli; o eso o que entren con un bebé al cine que se pone a llorar cada 20 minutos como me pasó ayer.

rake dijo...

Vaya que si, ademas es que ahora en un rato libre que tienes no sabes que hacer... demasiado estres!

Lara dijo...

Ya te digo que me extrañaba, bueno, cuídate y relájateme un poquito ;)
Muuuuacks!

Chasky dijo...

Ahora por ejemplo mientras leo vuestros comentarios estoy haciendo una dichosa redacción en inglés. Tengo que escribir sobre qué haría si me tocara la lotería y lo único que se me ocurren son estupideces.

Anónimo dijo...

Pues si, deberiamos vivir algo más despacio y disfrutar más de las cosas..

bessos

Pilar_Cordoba dijo...

Obviously, if I won the lottery I would like to take a long holidays in Cuba, Mexico or Punta Cana.
But there's a problem... I don't play any kind of lottery. Jajajaja. So...it's very difficult that I could go to the beach with that money. Don't you think so?

Llevas toda la razón, vamos a mil y no saboreamos los buenos momentos que la vida nos brinda.
Un besito y suerte con el inglés.

Chasky dijo...

Qué susto me has dado, cuando he empezado a leer tu comentario he pensado que había copiado sin querer el comienzo de mi redacción.

Pilar_Cordoba dijo...

¿No me digas que también has puesto lo de las vacaciones en la redacción? Jajajaja si es que no falla. Es un argumento muy socorrido.
Ainsss qué no dariamos por estar tumbaos al sol en alguna playita de esas, verdad?
Otro besito y ya si que de verdad, buenas noches.
I'm goingo to sleep! Good night!

Anónimo dijo...

Sobre los "tiempos modernos" y la vulgarización tecnologíca paso de opinar porque no quiero decir tacos en tu blog.

Por cierto: no viene a cuento pero después de éxito de audiencia del festival de Eurovision creo que deberíamos continuar con la tradicion que iniciamos hace un tiempo de presentar una anti-canción en el festival de Antivision. Piénsalo: Eurovision merece un festival "alternativo" todavía peor.

Cutre, pero necesario, jeje!

María dijo...

Yo intento tomarme todo con absoluta tranquilidad...sino cualquier día de estos me da un tabardillo!!!!

anuski dijo...

Me ha encantado este post, yo a veces también me pregunto y me paro a pensar sobre todas estas cosas, que con el ritmo que llevamos actualmente a saber cómo vamos a terminar.

Besos

Anónimo dijo...

por eso no sé hasta qué punto es bueno esto de las maquinas... no sé yo qué decirte...eh?

EnLaOscuridadDeLaNoche dijo...

Cierto... a veces nos comportamos como autómatas... ¿vivimos o sobrevivimos?
Un besín.

BettyBlu dijo...

Lo del bebe ya me supera, jeeje, joder, eso nunca me ha pasado. Qué poca consideracion los padres...

En fin, un beso

Anónimo dijo...

Tengo que discrepar en tu planteamiento sobre el cine. Que yo sepa "La fila de los mancos" no es de nuestra generación, si no de esa que comentas tu que no quitaban el ojo de la pantalla, el ojo lo mismo no, pero la mano la metían donde les dejaban, como todos....
Y lo de no poder ver la misma peli más de una vez tampoco era así, porque ponían la misma película un montón de tiempo en el cine, no como ahora que sólo duran un par de semanas en cartelera y algunas ni eso. Mi abuelo tenía un amigo acomodador que siempre le colaba y se veía las pelis mil veces, cuando no estaba en el teatro viendo a Celia Gámez (siempre ha sido un poco picaruelo) porque pillaba entradas de "Clá" que eran muy baratas. (Para el que no lo sepa, entrada de Clá suponiá que te sentabas en el gallinero y tenías que aplaudir cuando un tío te lo indicaba).
Parecen las historias del abuelo cebolleta, pero es que realmente lo son...

Chasky dijo...

Eso que cuentas era cierto, antes cuando una película te gustaba mucho podías ir al cine a verla unas cuantas veces, eso sí, en cuanto la quitaran de la cartelera olvídate de volver a verla.