Sin título

No sé vosotros si dedicaréis mucho tiempo a pensar en los títulos de vuestros posts, pero a mí al menos es lo que más me cuesta. Soy un vago de campeonato, me cuesta ponerme a escribir pero una vez estoy delante de la pantalla me lío, pim pam pim pam, y no tardo una mierda en escribir dos o tres posts seguidos. Sin embargo, lo de los títulos lo llevo fatal.

Como no sabía que imagen poner al post he aprovechado para poner una obra de un artista que me encanta, ¿alguien sabe quién pintó este cuadro?

A veces creo que no valoramos la importancia de un buen título, y un título viene a ser el 50% de un post, tenemos que conseguir atraer a nuestros lectores, creándoles interés, expectativas, curiosidad. Pero qué fácil es decirlo…, y qué difícil es conseguirlo. A veces salen los títulos solos, como por arte de magia, pero en otras ocasiones, uffff, le das vueltas y vueltas al asunto, lees cinco o seis veces el post, pero nada, que la musa de los títulos no te acompaña ese día. A mi me ha pasado incluso de dejar un post totalmente terminado como borrador durante semanas porque no era capaz de ponerle un mísero título. Y al final qué haces, pues ponerle el menos malo para ti, que no quita que sea quizás de los diez títulos más mierdosos de la historia de los blogs.

Ain los títulos, podríamos estar aquí horas y horas hablando sobre ellos...